Hace unos días tuve la ocasión de pasear por la Font de la Guatlla. Un barrio de Barcelona, para mi, totalmente desconocido y que me sorprendió gratamente. Durante el paseo aprendí muchísimas cosas como, por ejemplo, que esta zona de la montañooa de Montjuïc se empezó a construir a raíz de la Exposición Universal que se celebró en la ciudad en 1929.
Lo que más me gustó fueron las casas unifamiliares situadas en la ladera de la montaña. Aunque, por desgracia, no quedan muchas, este conjunto de casas ofrecen una sensación de pueblo, calma y tranquilidad que se agradece para poder escapar del ritmo trepidante de la ciudad.
Lamentablemente, esta barriada del Turó de la Font de la Guatlla tiene los días contados. En 1976 se aprovó un Plan General Metropolitano, que incluía un proceso de expropiación del área, con la intención de convertirla en zona verde e integrarla en el parque de la montaña de Montjuïc.
Texto y fotografías: Vanesa Hereu
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